Dos ex consellers golpistas tienen como abogado a Boye, condenado a 14 años por participar en un secuestro de ETA
Si el ex presidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha contratado como abogado a Paul Bekaert, especializado en defender a terroristas de ETA, sus compañeros de huida no se quedan atrás.
Los ex consellers Meritxell Serret y Antoni Comín, que huyeron de la Justicia española junto a Puigdemont, tienen como abogado al chileno Gonzalo Boye, quien fue condenado a 14 años de cárcel por colaborar con ETA en el secuestro del empresario Emiliano Revilla.
Boye asiste a Serret y Comín, que este domingo han quedado en libertad con cargos –junto a Puigdemont y a los otros dos ex consellers huidos a Bruselas– en la vista celebrada en la sede de la Fiscalía belga.
En una sentencia dictada el 13 de junio de 1996, la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional consideró probado que Gonzalo Boye cobró 21.000 (3,5 millones de pesetas de la época) de la banda terrorista ETA por colaborar en el secuestro de Emiliano Revilla. Boye fue condenado a 14 años de cárcel por estos hechos, junto a otros dos chilenos miembros del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) que también se prestaron a colaborar con ETA.
Cobró 21.000 euros por el secuestro
Los etarras mantuvieron al empresario encerrado durante 249 días en un zulo de apenas dos metros de longitud, excavado en un chalé próximo a la calle Arturo Soria de Madrid. Lo liberaron el 30 de octubre de 1988 después de que la familia pagara un rescate de más de 500 millones de pesetas (unos tres millones de euros al cambio actual).
Según la sentencia, Boye “participó plenamente” en las labores previas de vigilancia y seguimientos para planificar el secuestro de Revilla. Para ello facilitó incluso su vehículo, un Chrysler 150 ranchera con matrícula alemana. Gracias a estas labores de seguimiento, uno de sus compañeros del MIR elaboró un dossier “con fotografías, horarios, matrículas de vehículos, hábitos, recortes de prensa y situación económica” de Revilla, que entregó a un enlace de ETA en Francia.
La sentencia también dio por probado que Gonzalo Boye visitó al menos dos veces la vivienda –que había pertenecido a los padres del enlace de ETA– en la que se excavó el zulo para mantener secuestrado al empresario durante ocho meses. Uno de los compañeros de Boye se trasladó en varias ocasiones a París para recibir instrucciones del etarra Francisco Múgica, alias Artapalo.
En pago por estas labores, siempre según la sentencia de la Audiencia Nacional, Gonzalo Boye recibió en una reunión celebrada en el café Comercial de Madrid 3,5 millones de pesetas (21.000 euros) que procedían del rescate pagado por la familia de Revilla.
Boye evadió el dinero a Cuba
Boye transfirió este dinero a Cuba utilizando como tapadera la sociedad Eko Work, que había constituido junto a uno de los miembros del MIR y que teóricamente se dedicaba a “comercializar un aditivo para los combustibles derivados del petróleo”.
La sentencia especifica que se trataba de “cantidades recibidas de ETA, procedentes del rescate, como parte de la retribución de la actividad de los procesados” por sus labores de apoyo logístico al secuestro.
La Sala aplicó a los tres condenados el agravante previsto en el artículo 57 del Código Penal de 1988, que prevé aplicar la pena en su grado máximo en “los delitos relacionados con la actividad de bandas armadas o de elementos terroristas». Gonzalo Boye sólo permaneció ocho años en prisión, que aprovechó para sacarse la carrera de Derecho.
Además de representar a los ex consellers golpistas de la Generalitat Meritxell Serret y Antoni Comín, Gonzalo Boye también es el abogado de los concejales podemitas del Ayuntamiento de Madrid Carlos Sánchez Mato y Celia Mayer, imputados por los delitos de prevaricación, malversación y delito societario en el caso del Madrid Open de Tenis.
El abogado de los podemitas
Boye también representó como abogado a la diputada de Podemos Tania Sánchez, cuando fue imputada por adjudicar a su hermano 1,4 millones de euros en contratos del Ayuntamiento de Rivas. La ex novia de Pablo Iglesias quedó absuelta tras asegurar que desconocía que había adjudicado estos contratos a su hermano.
Gonzalo Boye es además secretario del consejo de administración del diario digital que dirige Ignacio Escolar y editor de la revista Mongolia, que organizó el acto en el que Juan Carlos Monedero difamó al presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, asegurando que tiene problemas con las drogas.